miércoles, 2 de septiembre de 2009

MIS EXPERIENCIAS EN LA UPANA

LO QUE OTROS CALLAN
MIS EXPERIENCIAS EN LA UPANA
Por: Raúl Chávez
E-mail: enekel2@hotmail.com
En 1982 me gradué de Profesor de Enseñanza Media en Lenguaje, Filosofía y Estudios Sociales, en la Universidad Rafael Landivar. Cuando estudié esa carrera, la universidad albergaba un reducido número de estudiantes y la cuota que pagábamos era de Q.15.00 mensuales; ahora según tengo entendido estudiar allí es prohibitivo o implica hacer grandes sacrificios o tener suficiente dinero, ya que lamentablemente la mayoría de nuestras universidades se están convirtiendo en establecimientos comerciales donde se negocia con la educación, tal como lo hacen los colegios que lucran con la necesidad del aprendizaje, y lamentablemente nuestras autoridades educativas tienen como ya lo dije en una oportunidad, las mismas propiedades del agua: incoloras, inodoras e insípidas; pues conociendo de las distintas exacciones, que bien pudieran ser ilegales, pues especulan con todo: uniformes, libros, cuotas extraordinarias, útiles escolares, tiendas, y tantas otras formas de lucro, amen de las altas colegiaturas mensuales.
Bueno, pero hablando del tema, después de más de dos décadas de haber abandonado mis estudios, este año los reinicié en la Universidad Panamericana de Guatemala, más conocida como UPANA, no venía del todo descontinuado, pues, me he caracterizado por ser un autodidacta, y también he estado relacionado con el quehacer educativo Cuando viví en Santiago Atitlán, fui catedrático del Instituto por Cooperativa y director de dos colegios de básico, actualmente soy director del ciclo diversificado del Colegio Fuente de Sabiduría de la aldea Paxtocá de Totonicapán, afortunadamente en los establecimientos que he trabajado son no lucrativos y con un fin social.
Mis experiencias en la UPANA son varias, pero quiero manifestar que me parece una buena universidad, al menos la extensión de Quetzaltenango cuenta con muy buenos catedráticos a quienes se les disfruta la clase y, esto lo digo con propiedad, pues he estudiado en otras universidades lo que me permite hacer la diferencia. Con cierta reserva entré a la UPANA, pues no tenías muy buenas referencias dadas por personas que habían escuchado esos comentarios de terceros, pero luego pude darme cuenta del contraste que hay con otras universidades que funcionan en Quetzaltenango. Además de la calidad de sus catedráticos las cuotas son moderadas y existe un clima familiar entre alumnos y el personal.
El primer semestre de la licenciatura en educación, que es la carrera que estoy estudiando me fue bien, aunque en son de broma hemos dicho con Carlitos, Sandrita y Zenaida, que es el grupo que tenemos de trabajo para el curso de Investigación Educativa, que estamos en la universidad sólo para validar nuestros conocimientos; la realidad es que he aprendido bastante y eso es satisfactorio y esto puede ser un llamado para la juventud para que se esfuerce por estudiar, que no haya obstáculos que impidan que todas y todos los guatemaltecos, contribuyamos para lograr una patria mejor. Sólo si nuestra gente se supera y se profesionaliza puede comenzar a cambiar nuestro país, ya que para el sistema y para la oligarquía es mejor únicamente tener mano de obra y no profesionales conscientes que logren una verdadera justicia social.
Bueno y hablando siempre de establecimientos educativos, fíjese que el Presidente llega a una escuela a hablar sobre el programa de Cohesión Social y después de más de una hora de discurso, pregunta a los alumnos si hay alguien que tenga alguna pregunta. Se para un niño y levanta la mano. El presidente le pregunta su nombre. -Mi nombre es Pepito y tengo tres preguntas: la primera es cómo piensa lograr todo lo que pretende con Cohesión Social, si el gobierno está pasando por una crisis económica; la segunda, por qué usted es presidente si Pérez Molina estaba en la cabeza de las encuestas, y la tercera qué tan cierto es su involucramiento en el caso Rosenberg. El presidente un poco chiveado se prepara para responder cuando de pronto suena el timbre para la hora de receso; por lo que dice a todos los niños que salgan y después del recreo continuaran con las preguntas. Suena nuevamente el timbre y todos entran a la clase. El Presidente dice: -En que estábamos, ¡Ya recuerdo, en el espacio de preguntas!, por favor si alguien tiene una pregunta que la haga. Se para un niño y dice su nombre: -Me llamo Juanito y tengo cuatro preguntas: la primera, como piensa lograr lo de Cohesión, si tenemos una crisis económica; la segunda, por qué usted es presidente si Pérez Molina estaba en la cabeza de las encuestas; la tercera, que de cierto es de su involucramiento en el caso Rosenberg, y la cuarta, ¿Dónde está Pepito?

3 comentarios:

  1. Hola Don Raulito, gracias por compartir sus experiencas y sobre todo por incentivar a los jóvenes para no darse por vencidos ante los obstáculos que se presentan en la vida, lo felicito ya que esa también es una gran lección que nos ayuda desempeñarnos a conciente y eficientemente en las actividades que desempeñemos a diario.

    Dios lo bendiga y éxitos a diario.

    Att. Sarah Monterroso

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  2. Don Raulito, que agradable poder compartir esta experiencia educativa con compañeros tan preparados y solidarios como ud., y descubrir que nunca es tarde para continuar con nuestra formación profesional.

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  3. Don Raulito. Gracias por compartir con los compañeros la experiencia de su vida profesional demostrando que la educacion es importante en cualquier momento de la vida.

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